Receta: Puches conquenses

Los puches conquenses son un dulce típico de la noche de difuntos, previa al día de todos los santos. Tanto su elaboración como sus ingredientes son extremadamente sencillos ya que hay que situar su origen en unos tiempos de escasez como fueron los posteriores a la Guerra Civil Española en la década de los 30.

Ingredientes
3 cucharadas soperas de harina
3 cucharadas soperas muy colmadas de azúcar
100 ml de aceite de oliva
Un trozo de pan de pueblo del día anterior
250 ml de agua
Canela para adornar

Preparación
Se corta el pan en porciones pequeñas más o menos cuadradas, lo que comunmente se llama «turranquillos».
Se frien los «turranquillos» en una sarten con aceite de oliva bien caliente. Se retiran del fuego rápido para evitar que se quemen y se ponen a escurrir en un papel de cocina para que suelven el exceso de aceite.
Dejar en la sartén el equivalente a tres cucharadas soperas del aceite que hemos utilizado.
Se pone la harina y el azúcar, y se deja que se tueste a fuego medio, removiendolo todo con una cuchara de madera.
Cuando la mezcla esté tostada y la harina haya perdido su sabor característico, echar el agua templada, y poco a poco, con unas varillas, ir formando una masa, dándole vueltas hasta que espese.
Retirar del fuego cuando empiece a hacer burbujear.

Para la presentación, se sirve caliente en un recipiente de barro, espolvoreando canela y con el pan frito en la superficie.
Este postre se conoce en otros puntos de España con otros nombres y algunas pequeñas variaciones:
El Cataluña se le llama «farinetes», en Córdoba «gachas», en Granada «gachas dulces», en Galicia «papas de millo», en Asturias «fariñes» con la diferencia de que se utiliza harina de maiz, o en Conil de la frontera donde se utiliza harina de garbanzos y recibe el nombre de espolea.