Esta es la historia de Gulsánam Alizhónova, una joven de 23 años que hizo frente a unos acosadores y casi la envían a juicio por ello. Pero también de Uzbekistán, un país de Asia Central donde siguen muy vivos los principios patriarcales que discriminan a la mujer.
Su odisea comenzó el 25 de junio. Alizhónova acompañaba a su cuñada, que iba a viajar con su hijo de diez meses hasta Andiján. Estaban en la calle hablando con el taxista que les iba a llevar. Entonces llegó un coche con dos hombres, uno de los cuales bajó y empezó a burlarse de ella porque vestía una camiseta y pantalones cortos.