Que hacer con un pollo caído

Si vemos un pollo caído en el suelo, lo más lógico es pensar que está abandonado, que necesita ayuda, protección… Sabemos que es muy difícil resistirse a la «llamada de socorro» pero realmente, en muchos casos, estamos interviniendo cuando no deberíamos hacerlo.

«¿Llevármela a casa es realmente lo mejor que puedo hacer por el ave?». A menudo nos llegan a través de las redes este tipo de consultas y siempre decimos lo mismo: si te encuentras a un pollito huérfano, no lo cojas.

Sus padres no lo han abandonado. Tampoco es un pollito huérfano, sino que se trata de un volánton, aves que todavía no vuelan bien pero que son ágiles para saltar del nido. Si lo coges, las probabilidades de que sobreviva disminuyen. Lo más probable es que los padres estén cerca, esperando que te marches para alimentarle.

Solo te recomendamos que cojas a un pollito en dos situaciones:

si ves que corre peligro su vida por coches, mascotas u otros. Entonces lo mejor es cogerlo y ponerlo a salvo en un árbol hasta que lleguen sus padres;
si el pollo es de vencejo, un ave totalmente adaptada al vuelo, que no será capaz de volar desde el suelo, ponlo sobre la palma de tu mano, lo más alto posible en un sitio despejado y deja que vuele, nunca lo impulses o lances. Si no vuela, llama a un centro de recuperación.