Hay carteles publicitarios que se han convertido en un icono de las grandes ciudades. El Tío Pepe de la Puerta del Sol o el luminoso de Schweppes de la Gran Vía de Madrid son algunos de los ejemplos más representativos. Unos carteles publicitarios que ya son patrimonio de la ciudad y que han inspirado al modelo desarrollado por un pequeño pueblo de Cuenca, Olmeda de la Cuesta.