El cansancio espiritual de la mujer es ese estadío en el que siente que se ha perdido a sí misma, está como bloqueada, sabe que necesita respuestas y por alguna razón no para de escuchar a su Alma.
Es esa mujer que la ha hecho de todo… ha sido madre, trabajadora, esposa, amiga, hija, consejera (sin ser ese rol físicamente, sino espiritualmente) y en síntesis, la heroína súper poderosa que un día simplemente siente que debe parar, porque materialmente ya no puede más.
Es esa mujer que un día despierta sintiendo que es tiempo de tomar su poder y creatividad para expandir su alma, es esa mujer que abruptamente empieza un camino nuevo aunque nadie la entienda y todos la critiquen inclusive tachándola de mal carácter, loca y mala.
Cuando esta mujer llega a ese punto de su vida, es porque está lista para emprender el viaje de regreso a sí misma, tomar su niña, su adulta y su sabia y combinarlas en una esencia divina que resida equilibrada en su alma para tomar un camino interior que la devuelva por el camino de regreso a casa.
Namaste.